Más de tres décadas han transcurrido en este esfuerzo sostenido y continuo para lograr la utopía de que no mueran más personas en el tránsito. «Este aniversario es especial, el primero sin su fundador y Presidente, el Dr. Alberto Silveira, quien, con tesón e idealismo, desde 1990, le dedicó su vida a este ideal junto a su equipo», expresó María Cristina Isoba, Directora de la asociación civil.
Luchemos por la Vida instaló la problemática de la seguridad vial en la agenda pública argentina abriendo un camino de compromiso y acción desde la sociedad civil, por la vida en las calles y rutas, cuyo modelo muchos otros siguen hoy en el país y fuera de él. «La acción de Luchemos por la Vida continuará con su legado, para ser fiel a la utopía, que también puede llamarse de la Visión Cero en el tránsito», destacó Isoba en referencia al reciente fallecimiento de Alberto Silveira.
Para conmemorar los 33 años, la directora de Luchemos por la vida, hace un recorrido de las acciones realizadas para llegar a la comunidad toda y a las autoridades de todo el país y dentro de ellas. En este sentido, destaca algunas de ellas.
Campañas de concientización en televisión, radio y otros medios audiovisuales, que, hasta hoy, llegan a los confines del país y los trascienden; este año, con la publicidad “Cuidate, vos que tenés cerebro, usá casco”.
Programas educativos en escuelas para niños y jóvenes y a distancia.
Cursos de capacitación para docentes, municipios y empresas.
Elaboración de videos y otros contenidos didácticos.
Estudios, estadísticas e investigaciones y propuestas de Legislación.
Actualización constante y continua interacción con organismos internacionales y ONG.
Presencia permanente en las redes sociales, como Facebook, Instagram y Twitter, por mencionar algunos de los principales caminos recorridos en estos años de intensa actividad.
Respecto de la legislación en nuestro país, desde la asociación señalan que «Si bien hubo importantes cambios legislativos y otros en estos 33 años en Argentina, desde los comienzos de Luchemos, la inercia gubernamental resulta demasiado lenta, y se cobra su precio en vidas humanas. Pero somos positivos, ya que sabemos que muchas vidas se han salvado con lo logrado en estos 33 años en nuestro país».
Las autoridades, además agregaron que «también sabemos que la lucha debe continuar, ya que queda mucho por hacer hasta alcanzar la utopía de no más muertes en siniestros de tránsito evitables».
Fuente consultada y material audiovisual: Luchemos por la vida